TRASTORNOS ALIMENTARIOS E INSATISFACCIÓN CON EL CUERPO
Hace tiempo que te sientes mal e insatisfech@ contigo y con tu vida. Tienes la sensación de no ser aceptad@ y de que, aunque te esfuerzas, nunca es suficiente. Te encantaría ser una persona segura, exitosa, con muchos amigos y aceptada por todos. Te planteas que, quizás, si adelgazas o cambias de aspecto, todo mejore. Comienzas a comer un poco menos y a adelgazar. Tienes la sensación de que, por fin, controlas algo. Las personas que te rodean te dicen lo bien que te ven, te miras al espejo y la ropa te queda grande, etc., y cada vez que ocurre esto, fugazmente, te sientes más segur@ y satisfech@. Con el paso del tiempo, cada vez te produce más miedo comer, te aterroriza subir de peso y te sientes más en descontrol. Los pensamientos que pueden mantener esta situación pueden ser “si adelgazo un poco más, me sentiré más segur@”, “aún puedo mejorar esta parte de mi cuerpo” o “no es suficiente”.
Es posible, que alternes periodos de restricción alimentaria, con grandes ingestas de comida (atracones) y conductas que las compensan (vómitos, ejercicio intenso, laxantes, diuréticos, etc.), para restablecer el control y disminuir el miedo a subir de peso. En otros casos, el hecho de sentirse mal o insatisfecho (por diversos motivos) es la causa de la conducta de comer, debido a que comer tiene un efecto ansiolítico, “anestésico” emocional y gratificante.
Las consecuencias emocionales, cognitivas, conductuales y físicas de estas conductas alimentarias inadecuadas son devastadoras y no consiguen proporcionarte una sensación de bienestar real, global y estable.
Si te sientes identificad@ con uno o varios de estos sentimientos, pensamientos y conductas, contáctanos, podemos ayudarte.